C. 26 No. 358 x 43 y 45 Fracc. Monte Albán

Sobre Dios

Enseñamos y creemos que hay un solo Dios, creador y sustentador de todo. Y que en el único Dios vivo hay tres personas: El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo de la misma sustancia, poder y gloria. 

Sobre el hombre y el pecado. 

Dios nos creó a Su propia imagen y semejanza para que lo amáramos, viviéramos con Él y lo glorificáramos. Sin embargo, por el propio deseo de nuestro corazón desobedecimos a Dios y esto trajo una separación completa de Él, provocando el sufrimiento, corrupción y muerte de todo aquello que ha sido creado. 

Sobre Cristo y la salvación. 

Después que el hombre pecó, Dios se comprometió a restaurar todas las cosas a través de un mediador y salvador, Jesucristo, quien siendo verdaderamente hombre y verdaderamente Dios, vivió la vida que debíamos vivir y pagó por nuestra culpa al morir en la cruz, resucitó y ascendió al cielo. Ahora todos aquellos que pongan su fe en Jesús son declarados justos por gracia a través de la fe solamente en Cristo. 

De las sagradas escrituras

Creemos que la revelación completa de Dios está en la Santa Biblia y que en ella está contenido todo aquello que el hombre debe saber para conocer verdaderamente a Dios, así mismo y el único camino a la salvación a través de la fe en Jesús. También creemos y enseñamos que la Santa Biblia es la autoridad final en todos los asuntos de la vida del hombre.

De la Iglesia

La iglesia es el cuerpo de Cristo y creemos, enseñamos y confiamos que todos aquellos a quienes se les ha dado el don de la fe pertenecen a la Iglesia, la cual es una, santa, católica y apostólica. Todos aquellos que han sido llamados al arrepentimiento, fe y buenas obras deben tener una comunión constante.

Del fin del mundo

Confiamos en que nuestro Señor Jesús viene pronto para restaurar todas las cosas, hacer justicia y a levantar para vida eterna a aquellos a los que Él mismo llamó para salvación para glorificarlo por la eternidad. 

Credos y confesiones 

Somos una Iglesia Presbiteriana, nuestra fe está resumida en nuestros credos y confesiones los cuáles ponen de manifiesto que la Escritura es la autoridad infalible y final. Estos documentos confesionales marcan aquellos puntos que mantiene la unidad en los asuntos escenciales de la salvación. 

El propósito de los credos es: Glorificar a Dios según su verdad, Afirmar al único Dios vivo y verdadero, Resguardar la sana doctrina de los falsos maestros, Discernir la verdad del error doctrinal, Permanecer firmes a través del tiempo, Sostener la doctrina de la inspirada e inerrante palabra de Dios, Mantener la libertad con respecto a leyes, tradiciones y supersticiones humanas extrabíblicas, Confirmar a los hombres elegidos para ser ministros, Preservar la pureza de la Iglesia, Cumplir con la gran comisión. 

A continuación encontrarás los documentos confesionales más significativos de la Iglesia Presbiteriana. Te invitamos a leerlos para junto con nosotros cuando estemos reunidos podemos decir al unísono: “Yo creo”

Confesiones de fe